lunes, 18 de julio de 2011

Descontento en Chile ¿Diagnóstico marxista?

Autores:
José Alberto López Rafaschieri y Luis Alberto López Rafaschieri
www.morochos.org

Presenciábamos recientemente una entrevista a Montserrat Nicolas, analista política chilena. Ella le comentaba a Gabriela Frías, de CNN en español, que las protestas callejeras en Chile y la caída en la popularidad del presidente Sebastián Piñera se debían a que esta nación "es uno de los países más privatizados de América Latina", y a que allí "el mercado está sobre el Estado gracias al sistema económico que la dictadura legó".

Nos preguntamos, ¿hasta cuándo vamos a dar evaluaciones marxistas de los problemas que aquejan a nuestra región? A veces pareciera que nos olvidamos de todo lo que han avanzado las ciencias sociales de Karl Marx para acá. La popularidad del presidente chileno se ha venido a pique, de 63% en octubre pasado a 31% en la actualidad, como indican los estudios realizados por Adimark GfK, y es cierto que han ocurrido fuertes protestas contra su gobierno, pero eso nada tiene que ver con el sólido modelo de economía de mercado que posee este país.

A pesar de la crisis económica mundial, Chile tiene estadísticas de crecimiento extraordinarias (su economía se expandió 9,8% a principios de año), su inflación está bajo control y su tasa de desempleo se ubica en 7%. ¿Por qué las protestas entonces? Porque el sector universitario demanda reformas que permitan que más gente acceda a la educación, y porque los sindicatos se oponen al despido de trabajadores de empresas públicas como CODELCO. Aparte, el gobierno de Piñera subió el precio del combustible en la localidad de Magallanes comenzando el año, lo que provocó tanto rechazo que hasta hubo que cambiar al ministro de energía.

Es obvio que hay condiciones objetivas que explican el descontento contra el gobierno de Chile, mas no es nada apropiado suponer que hacen falta reformas anti-capitalistas en vista de los problemas coyunturales que enfrenta el presidente en funciones.


Artículos relacionados:

3 comentarios:

  1. Considero prudente decir que detrás de estos movimientos se encuentra gente y dinero de Venezuela,gente de Cuba ,Bolivia e incluso radicales Españoles asesores de la supuesta revolución en américa latina, su único fín es la egemonia basada en el terrorismo de estado, el inicio siempre es el mismo causar revueltas para poder justificar actos violentos que menosprecien la libertad de la derecha muy criticada por los revolucionarios socialistas y bendecida por los paises cuyo crecimiento ha demostrado que extremos dictatoriales como el Boliviano con sus exponentes Linera y Evo enriqueziendose en forma sinverguenza al lado de sus elites que supuestamente luchan por los campesinos, mostrandosé indigenistas al mas puro estilo de Hitler como la raza dueña de America, anteponiendo la igualdad de los seres humanos .
    Creo feacientemente que existen grupos cuya única finalidad es desestabilizar la democracia chilena que pese a todo actualmente como país en sudamerica es uno de los más desarollados.

    ResponderEliminar
  2. Ciertamente siempre hay grupos de izquierda radical que aplican agendas de saqueos y protestas violentas cada vez que llega al poder, en América Latina, un gobierno simpatizante de la democracia y la economía abierta. Lo hemos visto en Bolivia, Venezuela, Nicaragua, etc. En verdad no sería desatinado pensar que algunos de ellos estén operando tras la situación en Chile, pero también es cierto que Piñera debe corregir algunos errores de su gestión y prestar atención a las demandas del pueblo.

    ResponderEliminar
  3. Creo que los extremos y la radicalidad con la que pretenden actuar los gobernantes es totalmente inadecuada, derecha o izquierda radical intenta llegar a ser de un gobierno del pueblo a convertirse en pueblo del gobierno, mediante apropiaciones de Bienes, poder y dinero, que no está demás decir argumentando su mejor distribución.

    ResponderEliminar

Advertencia: Comentarios moderados. Si te expresas con groserías o insultos, tu comentario no será publicado.