Autores:
Luis Alberto López Rafaschieri y José Alberto López Rafaschieri
www.morochos.org
El gobierno de Chávez acaba de aprobar una reforma a la Ley de Ilícitos Cambiarios que incluye la negociación de títulos valores denominados en monedas extranjeras en el control de cambio, y permite sólo al BCV autorizar la asignación de esas divisas. No obstante, el endurecimiento de la Ley de Ilícitos Cambiarios en Venezuela nos genera muy malas expectativas sobre el futuro de la economía venezolana y el bolívar, debido a los siguientes puntos:
Reconocimiento:
Con el endurecimiento de la Ley de Ilícitos Cambiarios, el gobierno de Chávez asume de hecho, no de palabra, que CADIVI es incapaz para cubrir los requerimientos de divisas de la economía venezolana y que la mayor parte de los ciudadanos de este país se ven obligados a recurrir, por la ineficiencia de CADIVI, a vías alternativas para comprar monedas extrajeras.
Enfoque anti-consumidor:
La reforma de la Ley de Ilícitos Cambiarios lleva consigo la misma visión del mundo que Chávez aplica en la crisis eléctrica. La devaluación descontrolada del bolívar es vista por los chavistas como un problema donde se debe culpar exclusivamente a los consumidores. Pensar que el gobierno tiene algún tipo de responsabilidad en cualquiera de los asuntos que aquejan a los venezolanos nunca será para ellos una opción. Decir, “los ciudadanos compran demasiados dólares y gastan mucha luz”, es para el gobierno una salida más fácil.
BCV-CADIVI:
Por el endurecimiento de la Ley de Ilícitos Cambiarios aumentará la ineficiencia en la asignación de dólares. Se pone de lado una parte del trabajo de los operadores secundarios del sector privado -casas de bolsa- para que sea únicamente el BCV quien dé el visto bueno a cada una de las operaciones cambiarias en el intercambio bursátil. Es decir, el BCV pasa a ser ahora como un segundo CADIVI, y ni siquiera hace falta comentar el perjuicio que esto significa.
Inflación:
Los venezolanos tendrán que arreglárselas para conseguir dólares de cualquier modo gracias a esta reforma legal. Se crearán vías alternas -se habla de casas de bolsa mudándose a Panamá y compras por transferencias en el exterior-, pero esta oferta estará disponible sólo para las personas bien conectadas. De manera que el dólar se volverá algo más difícil de conseguir y esto repercutirá en su precio. Y como el 80% de los bienes que consume Venezuela son importados, habrá un efecto inflacionario.
Escasez:
Por el endurecimiento de la Ley de Ilícitos Cambiarios el problema de los dólares en Venezuela complicará aún más el trabajo de muchos importadores, sacándolos del negocio. Con esto el desabastecimiento en los productos básicos tenderá a empeorar.
¿Y al final?
Al final la devaluación del bolívar seguirá siendo una constante, y lo más probable es que empeore. Las medidas que está tomando el chavismo añaden más problemas que soluciones y recrean el escenario perfecto para los especuladores, quienes encontrarán en esta equivocada intervención del gobierno nuevas oportunidades para hacer ganancias extras.
Venezuela presenta gravísimos problemas económicos: una de las peores desinversiones del sector privado del continente, una de las peores inflaciones del mundo y una de las peores recesiones de esta galaxia, ¿cómo no va a haber devaluación en una economía con esas características? Pero en lugar de tomar medidas contra las causas, se actúa sólo contra los efectos. Para el gobierno de Chávez, el problema es la compra de dólares, no sus erróneas políticas macroeconómicas.
Lamentablemente, aunque en el gobierno no lo entiendan, la especulación en Venezuela es una consecuencia de las políticas socialistas que el chavismo ha aplicado durante una década. Así que mientras estas equivocadas estrategias macroeconómicas continúen, se mantendrán también sus perjudiciales efectos -ineficiencia en la entrega de divisas, inflación, desabastecimiento y devaluación-.
De nada sirve endurecer la Ley de Ilícitos Cambiarios si los extremos desbalances macroeconómicos de Venezuela permanecen sin atención del gobierno.
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ES definitivo, el gobierno lo que quiere es que nosotros los venezolanos dependamos del Gobierno, no el Gobierno del Pueblo como cualquier Gobierno Democratico, es la manera mas rapida de acabar con lo que queda de las empresas privadas, la inflacion bajaria si el gobierno le inyectara diniero a las empresas Privadas crearia mas empleo, que bueno si el gobierno tratara de ser socio de todas las empresas privadas, asi la economia funcionara a millon, pero no es lo que quiere por que asi no funciona las dictaduras o gobiernos totalitarios carlos remigio...........-a el 26 de septiembre comensaremos a democratizar este gobierno totalitario.......remigio.
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